Revisión de las promesas

Si, he cumplido mi promesa, y no, no ha sido tan difícil,
A pesar de que vengas de cuando en vez a mostrarte solitario y desvalido,
Aunque me juzgues por no ser el de siempre.
Ya he comprendido que no tiene caso, que no tienes lógica
Y he emprendido otras aventuras, otras conquistas, otros viajes, sin un rumbo fijo, con unos cuantos pasajeros de los que solo sé unos cuantos caracteres en la pantalla, una imagen desdibujada en un correo electrónico, y sus intenciones de salir por ahí, a medir el mundo.

A EL también lo alejé ya, fue bueno jugar con su cuerpo, encender su ingle, irradiar su vientre, propinarle placer y dolor en estas noches, sin compromiso de mi parte, sin dejarme llevar a un acuerdo, haciéndole creer que todo es como antes, mas nunca es para siempre, el juego tenía que acabar, sobre todo cuando ya no soy yo quien domina la partida, cuando una vez más comienza a decidir por si solo, cuando decide que es mejor la vida familiar a un poco de lujuria y placer que mi piel caliente quiere darle.

No van más esas dos historias…si, si, es casi la tercera vez que lo digo en esta pantalla, una vez más que se repite como telenovela barata que se resiste a salir del aire. Mas esta vez, al menos, hay previsibles reemplazos, deliciosas pieles de cordero con algo más que alcohol en el cerebro, inteligentes diseñadores de sueños y constructores de fantasías, y una que otra compañía que saca corriendo el aburrimiento.

Esta vez, seguramente, podré cumplir con mis promesas…